martes, 17 de agosto de 2010

A VUELTAS CON LA HISTORIA -1- (Ensayos 1)

Cuando en una reuníón uno se "señala" y dice que lee Ciencia Ficción, no suele recibir muestras de haber sido oído; si no te "amoscas" e insistes "alguno de vosotros la lee"? , el silencio es sepulcral y si todavía te quedan algunos redaños y remachas "no habéis leído nada ninguno"? siempre surge alguien: "de manera casual leí algo de Isaac Asimov...pero a mí eso de los marcianos y demás no me interesa".
Probablemente pondría más interés si supiese que en 1944 - en plena II Guerra Mundial, antes del desembarco de Normandía - una "revista de marcianos" puso en jaque al Ministerio de la Guerra norteamericano.
Cuando en Los Alamos se estaba investigando el control de una explosión nuclear, en la revista Astounding Science Fiction se publicaba un relato sobre una superbomba que podría destruir todo un planeta. En la construcción de dicho artefacto se hablaba de U-235, masa crítica, regulación por medio del boro...
Si tenemos en cuenta que el relato se puso a la venta 14 meses antes de la primera explosión en Alamogordo...la alarma saltó y se habló de "espionaje".
Se investigaron, se vigilaron, se interrogaron  al autor, al editor y a una serie de personas que relacionadas con los anteriores pudieran haber filtrado "datos sensibles".
La realidad es que toda la información procedía de Revistas Científicas que durante los últimos cinco años habían publicado artículos sobre el particular.
El autor,casi desconocido, era Cleve Cartmill; el relato "Tiempo Límite"; el editor ,todo un símbolo, John W. Campbell; y los "amigos" ,la vieja guardia de la Ciencia Ficción : Robert A. Heinlein, Isaac Asimov, Murray Leinster y L. Sprague de Camp.
El relato no estaba "adivinando" el futuro, nos lo estaba contando.
17-08-2010

2 comentarios:

  1. Buenas noches:

    En mi opinión, el problema radica en el concepto vago e impreciso que se tiene del género.

    Profundizando en el tema, observaríamos que es, cuando menos conocido y que muchas obras están ya en el inconsciente colectivo. ¿Quién no conoce?:

    Frankenstein, de Mary Shelley, las obras de Julio Verne( "Viaje al centro de la tierra" ,” Veinte mil leguas de viaje submarino), Stenvenson (El extraño caso del Dr. Jeckyl y Mr. Hyde), Wells (La máquina del tiempo, la guerra de los mundos ), London o Conan Doyle y en la antigüedad……los relatos de viajes fantásticos…como el de Ulises…


    Respecto a la anécdota que cuenta J.D. señala magníficamente alguna de sus características.
    Es un género donde el autor, utiliza los últimos descubrimientos científicos para desarrollar un mundo imaginario, que el lector al final, duda si es real o no. Expresando a veces, la capacidad , no ya de inventar, sino de anticipar.


    Concluyendo, no soy seguidora, sí un “pelín” conocedora, pero en disposición de aprender.


    Saludos desde Extremadura.Pilar.

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  2. Como acertadamente dice Pilar, los autores referidos pertenecen más a nuestra memoria de "aventuras" y no los relacionamos con la ciencia ficción...y las aventuras creemos se perdieron con los años.
    pero leyendo a Wells y su "Guerra de los Mundos", a Bradbury en "Farenheit 451" o a Burroughs y su saga de "Tarzán"...seguro que rrecuperábamos el "sentido de la maravilla" , al que no debermos renunciar.

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